El Ascorbato de Sodio intravenoso (Vitamina C) ha despertado un gran interés en el ámbito médico debido a su potencial terapéutico en el tratamiento de enfermedades infecciosas. Esta forma de vitamina C, administrada por vía intravenosa, permite alcanzar concentraciones plasmáticas más altas que la vitamina C oral, lo que podría ser beneficioso en el manejo de infecciones virales y bacterianas.
Estudios clínicos han demostrado que el Ascorbato de Sodio intravenoso puede tener efectos beneficiosos en el tratamiento de la sepsis, una respuesta inflamatoria sistémica a una infección. La combinación de vitamina C, hidrocortisona y tiamina ha mostrado reducir la mortalidad y la duración de la estancia en la unidad de cuidados intensivos en pacientes con sepsis y shock séptico.
Además, investigaciones han explorado el papel del Ascorbato de Sodio intravenoso en el manejo de enfermedades virales como la gripe. Altas dosis de vitamina C han demostrado tener efectos antivirales directos, interfiriendo con la replicación viral y reduciendo la gravedad de los síntomas en pacientes con enfermedades respiratorias agudas.
Es importante destacar que la dosificación y la administración adecuadas son fundamentales para optimizar los resultados clínicos del Ascorbato de Sodio intravenoso en el tratamiento de enfermedades infecciosas. Los profesionales de la salud deben considerar este enfoque terapéutico como parte de un enfoque integral para el manejo de enfermedades infecciosas, siempre bajo supervisión médica.
En resumen, el Ascorbato de Sodio intravenoso muestra un gran potencial en el tratamiento de enfermedades infecciosas, incluida la sepsis y la gripe.
Fuentes:
- Zabet, M. H., Mohammadi, M., & Ramezani, M. (2016). Effect of high-dose Ascorbic acid on vasopressor’s requirement in septic shock. Journal of Research in Pharmacy Practice, 5(2), 94-100.
- Hemilä, H., & Chalker, E. (2013). Vitamin C for preventing and treating the common cold. Cochrane Database of Systematic Reviews, (1).
